lunes, 13 de julio de 2009

El Nuevo líder

Desde que la tecnología se apropió de nuestras vidas y la información pasó de ser un privilegio de pocos a ventaja de muchos, sin importar géneros ni clases sociales, el mundo de los negocios evolucionó, cambiando con ello lo que era normal y aceptable, demandando a la vez, una catarsis en las empresas y sobre todo en quien ha sido durante mucho tiempo la figura más importante de éstas, el líder.

Un líder ya no es aquel guía que dado su inteligencia, capacidad de consenso y carisma, tenía a cargo la dirección de unos cuantos empleados, y de quien dependía en gran medida el rumbo de ciertos proyectos o incluso de toda la organización. Ser líder en estos tiempos, implica mucho más que eso, como bien señala Seth Godin, uno de los gurús del marketing, “el liderazgo requiere pasión, requiere creer”, sólo se convierte en líder quien cree en lo que realiza pues de esa manera puede transmitir seguridad a sus semejantes y lograr inspirar en ellos el deseo de superación. Seth Godin en su libro “Tribes: We need you to lead” ofrece una serie de claves favorables para enfrentar los nuevos retos del liderazgo, entre las que se encuentran:

1. Llega el primero: obviamente la imitación es un camino fácil y cómodo, pero ¿acaso imitando lograrás cosas diferentes?. Un buen líder no se limita, ni frena el de avance de su equipo.

2. No empieces por oponerte a algo, crea algo: otro camino sencillo, la oposición, pero sólo se superan los obstáculos cuando los enfrentamos y creamos maneras de superarlos.

3. Comienza por un “micromovement”: los cambios no llegan sólo, requieren de la iniciativa, de superar la barrera del miedo y creer en nuestros proyectos.

4. Se trata de inspirar, no de instruir: es importante que el líder sea consciente de que la gente no entra a las organizaciones buscando instructores, sino personas que como ellos les permitan desarrollar sus habilidades y les motiven para ello.

5. Acepte el estar equivocado en ocasiones: no le hará mejor ni peor líder, pero si le ayudará a llegar de una forma óptima a sus objetivos. Si ha fallado: reconózcalo, rectifique el rumbo y continúe adelante.

En definitiva, si se quiere ser un buen líder hay que estar preparado, ser participativo, innovador, colaborador, optimista, integro, inspirar confianza, respeto y humildad. Un buen líder sabe que sus éxitos dependen de un equipo, por lo que les valora, les ayuda a superarse y reconoce que para un hombre sólo el camino es duro, y sólo con la unión se logra la fuerza. MK.

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